MI VIEJO
El mes pasado se murió mi viejo. El trago que más me ha costado, y me sigue costando, digerir en mis cuarenta y seis años en este mundo.
Cada noche, durante todo abril, después de dejarla a mi vieja en su casa, volvía a mi refugio y me enfrascaba llenando un cuaderno de dibujos. Una forma linda de soportar la angustia mientras llegaba el sueño.
Aquí cuelgo algunos de esos dibujos paliativos.
Tambien se pueden ver estos y otros en el FB Cuadernistas, pero sin explicación.